Este tratado obliga a sus Estados suscriptores a pasar leyes, aun por encima de sus Constituciones, como por ej. la extensión de la duración de la propiedad intelectual, la privatización de las semillas y prohibición de su guardado y reproducción, la prohibición de los medicamentos genéricos, la implementación de sanciones por compartir conocimiento en internet, entre otras.

Cabe destacar que luego de que el energúmeno de la Casa Blanca se retirara del TPP, este tratado se había dado por fallido. Sin embargo, fue la propia cancillería chilena que lo reflotó, para llevárselo en bandeja a un nuevo amo: China. Esta subasta de la soberanía nacional fue encabezada por el ex vocero de gobierno y canciller Heraldo Muñoz, a quien ahora su partido está presentando como presidenciable...